jueves, 18 de diciembre de 2014

Quiero más feriados, no menos

Quieren quitarnos feriados religiosos y uno legal, a cambio de un día más de vacaciones, ya que, se considera que los feriados no son usados con su motivo propiamente tal, es decir de conmemoración de los hechos a lugar. Ni el 29 de junio (san Pedro y san Pablo), ni el 15 de agosto (Asunción de la Virgen), ni el 8 de diciembre (Inmaculada Concepción), ni menos el 12 de octubre (Día de la Raza).
   
     ¿Por qué querrán los honorables Diputados de la República, favorecer tan fielmente al pueblo chileno con ésta medida? Quizá no saben que el 67% de la población del país (si no más) según el censo 2012, profesamos el mismo credo católico, y por ello, tres de los feriados nos pertenecen. El día de encuentro entre dos Mundos, que todos llamamos Día de la Raza, es un hito tremendo de historia Universal, con un simbolismo de por medio en torno, según mi punto de vista, a los valores que tanto han estado en la palestra estos últimos años, como son la no discriminación, la aceptación e inclusión. Todos casi lo mismo, pero que aún no se logra.

     Es sólo mi simple percepción, sin si quiera estudiar el tema, que me parece que los Diputados no se cansan de tener vacaciones, para poder gastar en algo tanto dinero, ya que en un día feriado que pase calado entre una semana de trabajo, no alcanzan ni a relajarse en las costas del Caribe o quizá qué lugar prefieran ellos, en cambio, pueden justificar sus más largas estadías en los resorts si agregan esos feriados a las vacaciones legales, porque en total, ellos no necesitan feriados para faltar al trabajo y seguir ganando su inflado sueldo como el resto de chilenos.

     Como católico, celebro las festividades feriadas, y no sólo yo, pues el pasado 8 de diciembre, no era yo el único en la procesión de la Virgen, sino que se juntó mucha gente, que aprovecha el día feriado en su fin propiamente tal, al igual que los miles que acuden a pagar mandas, como vemos siempre en las noticias, de rodillas por kilómetros. Fue muy noticioso aquello de los jinetes en las cercanías de Los Ángeles, donde veíamos cuánta gente participó. No es necesario seguir abordando en especificar, pues sabemos que Chile es un país muy devoto por nuestra Madre María.

     Ahora, como estudiante, también quisiera hacer valer los derechos de los feriados, pues si bien, tenemos dos meses de vacaciones, compartimos en el año el alivio de un feriado que acorta la semana, libera del estrés propio del estudio, y obviamente, entrega un clima más agradable para continuar con la rutina luego del descanso, ya que no hay actividades propias de la celebración de la llegada de Colón a América. Si se agregan a los días de vacaciones legales, no tendríamos provecho de ello los estudiantes, por lo que lo consideraría (en palabras puestas de moda por políticos) una segregación y discriminación hacia los estudiantes.

     Quizá la solución no es quitar los feriados porque no se celebran, sino que, como buenos chilenos, aprovechar los motivos para celebrar. Falta más trabajo por parte de asociaciones culturales, desde el Ministerio de Cultura hacia abajo, para poder celebrar y aprender sobre el día del Encuentro Entre Dos Mundos. Falta lío (como dijo el Papa) en las parroquias y diócesis, para mover más gente, o tal vez, sólo para publicarlo más. Muchas veces las celebraciones existen, pero pasan inadvertidas, aunque tampoco podemos negar que el número de fieles que participan ha disminuido. Ahí viene el trabajo de la juventud, en revivir ésto. Ahí viene el trabajo de la cultura, en culturizarnos -valga la redundancia- y enseñarnos.

     Un festival del día de octubre, sería tan rico en cultura, más aún en nuestra zona sur, donde hay un sincretismo tremendo, fiel reflejo del encuentro de Europa y América, en donde las tradiciones se mezclan y hacen nacer un nuevo estilo. Porque el chileno es fruto de la mezcla del nativo y el extranjero, debemos celebrar aquello. Las costumbres araucanas, españolas y alemanas que tanto se ven en ésta región, son el Encuentro de Dos Mundos.

     Además de todo, en vez de quitar estos cuatro feriados, debería incorporarse uno más a los días pintados de rojo, y vaya que hace falta de informarlo: el 12 de febrero. ¿Que estoy de vacaciones y me pasa como si nada? pues sí, pero hay quienes trabajan, en un día de honor y orgullo de un pueblo y en homenaje a los héroes de la primera liberación nacional, pues ese día, pero de 1818, en la ciudad de Talca, se firmó el acta de Independencia, y no el 18 de septiembre como aún muchos creen.

     Espero entonces, que los Diputados dejen de sobarse las manos pensando en sus próximas vacaciones, que se conviertan al Evangelio y piensen en trabajar, pues para éso se les paga. Que inscriban el 12 de febrero como feriado irrenunciable y que si quieren eliminar algo, que sean sus alzas de sueldos y lujos desmedidos. Quizá si trabajaran todos los días como el resto de chilenos, sabrían lo que es un feriado en la semana. Quizá si fueran creyentes, no serían amargados. Quizá si no fueran corruptos...no serían diputados.

jueves, 20 de noviembre de 2014

Críticas Constructivas

Me retiro de los versos por ahora. Quiero y necesito hacer unas críticas que creo, son necesarias. Soy sólo un simple joven, pero tengo la capacidad de darme cuenta de algunas cosas y quiero realizar los siguientes dichos con el máximo de respeto.
   
     Primero, quiero hablar sobre la soberbia. La soberbia es uno de los siete pecados capitales, y el más peligroso, por así decirlo. La soberbia es creernos a nosotros mismos como un ser excelente, un ser perfecto, tan así que, no requiere de un dios, y hasta se llega a sentir superior a Dios. La soberbia es el más peligroso, pues nos lleva a caer en los demás pecados capitales, según me han enseñado y he leído. Autoanalizandome, me doy cuenta de lo soberbio que puedo parecer en ocasiones, al robarme el derecho de veracidad, al decir que tengo la verdad. Por favor, esto es un blog de opiniones, por lo cual, expongo mis pensamientos. Aunque, si bien es cierto, me he dado cuenta que sí puedo haber sido muy soberbio, y pido disculpas públicas por pensar como pienso y seguir pensando igual. Ahora, creo que eso no es ni de orgulloso ni de soberbio, sino porque así es mi mentalidad. Vamos ahora viendo que hay una solución a la soberbia, y es su virtud contraria: la humildad. La humildad es verdad y la verdad es la humildad, como decía el Padre Pío de Pietrelcina. Es algo difícil de llevar, quizás. Más aún en nuestro tiempo en que ser una persona de valores es nadar contra corriente, aunque es éso justamente lo que nos ha pedido el Papa Francisco a los jóvenes, que nademos contra corriente, que hagamos lío. Para comenzar a ser humilde, se debe comenzar por reconocer nuestros errores, saber pedir disculpa, y como decía Don Bosco: "no nos creamos necesarios". Los santos son ejemplos de vida para los cristianos, y hay uno de los santos que más me gusta su historia, que era la humildad andante: san Felipe Neri, quien incluso, se dice que el Papa le quería nombrar cardenal, el santo no aceptó. Un ejemplo muy bueno, aunque hay miles de santos más, que son iguales o mejores ejemplos.
 
     La otra crítica que quiero hacer, es hacia la Iglesia Católica. Sí, quiero criticar abiertamente a mi Iglesia; de la que soy parte, de la que soy hijo. Me cuesta comenzar a hacerlo, pues no encuentro las palabras correspondientes, pero comienzo así. Un católico, es decir, un miembro de la Iglesia Católica, debe pensar y actuar como católico. Un carabinero, quizá piense que el robo no es malo, pero su deber y obligación es, le guste o no, detener al infractor de la ley, es decir a quien roba. Lo mismo un católico. Ser católico es más que un nombre que uno use para definir su religión. Ser católico es pensar como católico y actuar como católico. Es amar a Cristo y saber escucharle y servirle mediante la Iglesia que Él mismo fundó en la Tierra. Por ello, que reconocemos a la Iglesia como Santa, aunque también sabemos que es pecadora por estar formada por hombres. Aunque sabemos que, el Espíritu Santo es quien mueve las decisiones más importantes de la Iglesia. Hasta el momento no hay crítica a la Iglesia, pero ahora viene: una persona que dice ser católico, de los que -como dice el Papa Francisco- licúan la fe, que participa de la Iglesia sin sentir a Cristo; que recibe los sacramentos sin creer en ellos, por un deber y por una especie de interés futuro; y que como si eso fuera poco, una hora a la semana la ocupa para Dios y el resto para hablar mal de su Iglesia, de la que esa misma persona es parte; creo yo, que es culpa de la Iglesia. ¿En qué sentido es su culpa?, en que la libertad que ha dejado la Iglesia a su feligresía, ha hecho que se generen los vacíos de conocimiento de la fe, del estudio del catecismo, y que seamos unos ignorantes en temas propios de ello. Ya no existe el amor por nuestra Madre Iglesia. Podemos ver muy facilmente a personas que dicen: "soy católico, pero no pienso como la Iglesia", "soy católico, pero me cae mal el Papa", "soy católico, pero no voy a Misa". El "pero" no debería existir. Uno es católico o no lo es. Creo que la Iglesia debería preocuparse por conservar la enseñanza y por entregarla íntegra sin modificaciones. No puede ser que un sacerdote diga que "el mandamiento es ir a Misa todos los domingos que se pueda" si es obligación oir Misa completa todos los domingos y fiestas de guardar. La critica es esa: que la Iglesia nos eduque mejor como laicos, en una época en que la Iglesia ha ido perdiendo su voz, su influencia en nuestras vidas; y ¿qué es la Iglesia? es la vía por la que Cristo llega a nuestras vidas, y de manera no sólo espiritual, sino también físicamente, haciéndose presente en cada santa Eucaristía.

     Quiero contrastar y no generalizar; que en facebook, sigo muchas páginas de jóvenes que aún tienen mucho amor por la Santa Iglesia Católica, por las tradiciones, y de esa forma se acercan a Cristo mucho más, o al menos, demuestran un gran amor por Él y cercanía. Páginas de admiración por Papas, por las tradiciones y una juventud cristiana comprometida. Así como lo pude vivir en carne propia junto a millones de jóvenes de todo el mundo en la Jornada Mundial de la Juventud en Río de Janeiro en 2013, y junto a miles de jóvenes chilenos en la Caminata de la Juventud en Auco, en el mismo año.

     Antes de cerrar el tema, quiero además, enfatizar el ataque que sufre la Iglesia y que siempre ha sufrido, y como dicen algunos, la Iglesia es Santa, Católica, Apostólica, Romana y Perseguida. Y aún en el siglo XXI son perseguidos en países como Siria, Irán, China y muchos más. Incuso, me acaba de llegar un correo en que me cuentan que planean boicotear al Papa en su visita al Parlamento europeo. ¡Por favor! quisiera pedir a los católicos que lean ésto, que nos unamos en oración por la unidad de la Iglesia, la comunión de los santos; Por la evangelización y por los perseguidores. Por la conversión de los que no conocen a Dios y por las vocaciones. Por la gente que sufre, y por tantos motivos que hay para rezar. ¡Jamás es suficiente! y aún así no dedicamos ni unos minutos muchas veces. Espero confiado y seguro que la Iglesia seguirá firme, pero es trabajo laical también, el llevar la evangelización más allá y mejor.

     Soy un simple joven que expone su opinión. Perdónenme por errar y recen por mí.

viernes, 7 de noviembre de 2014

Vuelvo al verso, vuelvo a la rima

Un tiempo pasé sin publicar, pero debo yo continuar. No podía dejarse ausentar la obra que voy a presentar:

Me dan ganas de escribir tanta poesía,
motivado por el clima y el amor que llego a sentir,
mis emociones, mis motivos,
mis penas y alegrías,
debo expresarme de este modo
y ser feliz.

     Surge a modo de introducción, en que se presenta una intención: escribir poesía; una motivación: el clima y el amor, que era un clima de lluvia, pero esa lluvia de verano. En Panguipulli, sucede que en medio del calor del verano, viene una semana (o más o menos) de fuerte lluvia como pleno julio, y ésto lo escribí en esa semanita de lluvia, en que me encerré en la casa a llorar con letras una pena estúpida de un amor inexistente. 

Me dan ganas de escribir tanta poesía,
motivado por tu ausencia y mi incertidumbre de quién eres;
llorando la partida de alguien que no sé;
llorando los abrazos que no dí, por no tenerte;
llorando los besos que no dí, por no tocarte;
llorando las caricias que no dí, por no verte;
llorando por las noches, tu fría ausencia junto a mí.

    Lloro a alguien que jamás estuvo, que jamás conocí, que jamás toqué, ni vi -ni si quiera a lo lejos- ni nada. Tan sólo sabía que existía, aunque vaya que lo dudé. Camila fue unas semanas muy lindas, como un neo amor por correspondencia. En ese sentido, creo que las redes sociales entregan demasiadas "realidades virtuales" perjudiciales para la integridad humana, más aún de un adolescente, en el aspecto sentimental.

Me dan ganas de escribir tanta poesía
y la lluvia me brinda la melancolía necesaria,
para pensar en ti y el amor que me jurabas,
pero al momento de actuar
sólo me decepcionabas;
al momento de juntar miradas
juntabas tus pestañas;
al momento de unificar voces,
callabas;
a la hora de tocar tus manos
te marchabas;
y a la hora de decir adiós,
ya no estabas conmigo.

     Cada vez que quise ir a por ti, me dejaste a un lado con mil y un excusas. Lo que reflejo aquí, es simplemente que la disposición por parte de esta mujer, jamás estuvo sintonizada a la mía, y cuando me dí cuenta, ya no me pude despedir, pues se había ya ido y quedaba yo solo en una relación turbia y mentirosa: totalmente falsa.

Me dan ganas de escribir tanta poesía,
y dejarla plasmada en un papel, como en antaño.
Inmortalizarla a lápiz, para que en un par de años
pueda revivir los sentimientos que me causas,
pueda sentir mi juventud al leerla
y pueda revivir estas tardes de lluvia.
Quisiera plasmarlas en mi cuaderno con un lápiz,
pero mi mano se cansa entre vuelta y vuelta.
Son ellas las que dejan, dicen algunos,
mi letra sigue viva, aunque mi mano yace muerta.

     Las ganas son claras: escribir. Hace mucho no escribía poemas, mi cuaderno estaba olvidado, y por ello hago énfasis en escribir a lápiz, puesto que este poema lo escribí en un estado de facebook directamente y en seguida lo publiqué. Luego lo transcribí a mano a mi cuaderno, con la pereza que comenzó en este verano, que surgió desde ya con la flojera que me causaba escribir a mano y queda expuesto en que mi mano se cansa entre vueltas que da.

Me dan ganas de escribir tanta poesía
retratando la lluvia que golpea en el cemento,
el deseo de un beso bajo el agua que me moja,
en tono gris, las nubes nos dibujan el amor,
el rojo rubí, tus labios, nos brindan el color
y nuestros corazones juntos, nos brindan el calor.
Nuestras manos apretadas, nuestros labios apegados,
nuestras mentes enredadas, por el amos soñado
con los ojos abiertos, mientras abrazo tu aroma,
mientras despierto y me veo solo, en la lluvia
parado en la soledad, sin más que tu recuerdo,
sin más que un pensamiento,
con cara conocida.
¿Quién eres?, no lo sé, pero pienso en ti a diario,
jamás te conoceré, ni te conocí,
jamás te besé, ni te vi,
alguna vez te hablé, y creo, jamás te oli,
alguna vez te quise, y sé que igual tú a mi.

     En la desesperación por retratar un paisaje próximo y la misma desesperación que me causan los hechos, la rima se extravía y se torna muy floja. Casi ni la encuentro cada vez que lo leo, más ahora que lo transcribo.

Me dan ganas de escribir tanta poesía,
pero si la escribo siento que no lo será.
Sólo escribiré un texto malo en versos,
que mi penosa historia llegue a alguien más
y moleste.
Que alguien pierda su tiempo
leyendo estas imbecilidades,
de mí planeando cosas,
poesía quiero escribir.
De mí escribiendo en versos,
sin nada bueno que decir.
De mí recordando a alguien
que jamás estuvo aquí.
De mí esperando un día
poder conocerte a ti.
De mí, mientras busco papel y lápiz, así
podré escribir poesía, y saciar mis ganas al fin.

     Al fin termino esta pérdida de tiempo para un lector aburrido. Al fin termino una penosa historia, pero hay que agregar algo: es sólo la primera parte. Sí, porque aunque ni yo lo supiera, en unos meses más adelante, se desarrolló un hecho que llevó a la continuación de ésto, pero éso será material de una nueva entrada. Por ahora, sólo quiero escribir tanta poesía, así como la escritora colombiana Marcela Bastrán, quien ya publica su libro de poemas Café y Poesía. Mi cariñoso saludo a ella, y pronto, más tarde que temprano, pero aún así pronto, estará publicándose Un Grito Desesperado, libro que recopile algunas muchas páginas de mi cuadernito de poemas y de notas y escritos que tengo por ahí. Ahora sólo dejar cerrado, esperando seguro que nadie lea ésto, como siempre sucede. Ahora, si usted ha leído ésto, le felicito: ahora conoce una parte de mi vida que nadie conoce.
    
     Gracias Camila por un lindo comienzo de año y por tanta pena, a la que le llamo inspiración poética: alimento de gran parte de mis poemas.

miércoles, 22 de octubre de 2014

Los versos recién comienzan

Continuando con el cuedernito de poemas, hoy traigo tres más. Con palabras inventadas, se centran en hechos, que suceden día a día, la rutina, la discriminación y conflictos en general. Son muy distintos, pero en tiempo son cercanos.

     Espera Melódica Silenciosa lo escribí el 16 de octubre de 2013, y no recuerdo si fue o no en el cuaderno. Ese fue el primer poema, pero arranqué la hoja y lo di a alguien para que lo publicara, o qué se yo. Luego, lo volví a escribir (pues le había tomado una foto), y lo volví a sacar en vacaciones de invierno, al regalárselo a una misionera española como recuerdo mío. Para mí, es un poema muy valioso, como todos, pero ése más aún, pues es el primero de esta etapa, y el primer poema mío que me aprendí casi completo de memoria; y aún, sin tener para leerlo, puedo escribir gran parte de él:
Espera melódica silenciosa,
La gente aguarda en sus asientos.
Su egoísmo y temor
Se nota en sus miradas;
Su tristeza y ambición
Se nota en su ser;
Su egoísmo y desempatía
Se nota en su actuar:
En apartarse un asiento
Del hermano que aun lado está.

     Si bien, la rima y la historia es muy mala, lo divertido es que este poema, primero fue un dibujo, que me motivó hacerlo una sala de espera, y de allí viene el nombre de Espera. Lo de melódica, es porque había una música ambiental muy sutil y que amenizaba el grave silencio de la gente. Ese silencio melódico, es que no estaba en silencio el lugar, pero sí lo estaba. La gente llegaba, miraba al que estaba sentado de pies a cabeza, y prefería correrse una silla más allá para no estar con él. Ese sentimiento de disgusto por la actitud fue lo que me llevó a escribirlo.

     Luego, pasan poemas de confesión, que nadie ha leído, a no ser que mi amiga se haya molestado en leer tan aburrido presente. Llego luego a otro poema simpático, como lo es Coca con limón, el que describe una de mis mañanas de soledad en la casa, donde despierto tarde, reviso el teléfono, desayuno un vaso de bebida con un trozo de limón flotando en ella, y ya no puedo seguir durmiendo. Lo que me gusta de escribir esas cosas tan simples e insignificantes, es que al volver a leerlas, vuelvo a recordar aquel momento y me veo nuevamente tirado en la cama, vistiendo pijama:
Coca con limón, mi desayuno
Acompañado de un mensaje al celular.
Ruidos interrumpieron mi descanso,
Ruidos que me han hecho despertar.
Mi pijama es ahora mi escudo,
Las emociones me invaden al pensar.
El cielo de gris, torna a celeste:
Creo que un gran día va a comenzar.

     Este poema se encuentra completo en mi página de poemas, en donde he filtrado algunos. En seguida de escribir ese, escribí Trompeta Multicolor, que en realidad, había escrito la primera parte en abril, y luego, en octubre o noviembre, al transcribirlo al cuaderno, le añadí más versos. Lo que me llevó a escribirlo, fue la toma que se le hizo al liceo cuando yo era presidente del CDA, y me opuse a realizarla, pues no tenía sentido. Los muertos alardeantes, era un grupo reducido que movió masas en mi contra, y rompieron mi trompeta multicolor, que representa mi voz pluralista y motivadora, por lo que debí cantar a capella, sacando autoritarismo y opresión. Ellos sabían que no conseguirían nada con la toma, ni lo hicieron, sólo querían la toma. Ese poema también está completo en mi página:
Soy un unicornio
Que va de paso por este mundo fugaz.
Al sonar de su trompeta
Levanta muertos alardeantes
Que aúllan por su bello y hermoso sonar.
(…) no logran lo que pedían,
Pero sí lo que querían:
No era algo mejor
Que mi trompeta multicolor.

     Ahora, la temática de los poemas, cambiará en los siguientes, pasando más a enfocarse en mí. Es así, como se encuentran desilusiones amorosas, enamoramientos, logros, sentimientos y demás, pero propios. Una pequeña muestra de eso han sido el poema del Unicornio y Coca con Limón.

domingo, 19 de octubre de 2014

Tiempo sin entrar, tiempo de rimar

Hizo falta más de dos semanas para que vuelva a escribir. No he escrito, simplemente por flojera. Soy un tipo inconstante. Más bien, sí lo he hecho y cuatro veces, pero ninguna de las tres me logró satisfacer ni tampoco las terminé. No me di el tiempo de volver a comenzar otra hasta hoy. Hoy escribo ésta, y es la definitiva. ¡Venga! Que si no subo algo ahora, ya sería bueno dar por muerto el blog, y además, sacando una síntesis de cada uno de los intentos anteriores de escritura, puedo sacar una gran entrada.

     Comencé hablando sobre mi peregrinación a los santuarios y fue lo que más temática me provocaba, y es por lo mismo que pienso que requiere una entrada especial y particular. Luego, traté también, quizá, algún tema medio amoroso o amistoso, los que siempre termino por traducir a poemas que jamás alguien leerá y los plasmo en mi cuaderno secreto, como por ejemplo un borrador que sigue aquí guardado bajo el título “Flores y Desamores”, en el que trataría de mezclar la hermosura del copihue con un “amorío frustrado”, y que comenzó como columna, siguió como narración, pasó a ser poema y lo he dejado como canción, la cual era muy larga y terminé por borrarla toda y volver a escribirla, mientras caminaba sólo de noche hacia mi casa.

     Si sigo con el tema de los poemas, me puedo detener y evocar toda esta entrada a ello, lo cual me parece estupendo, y a la vez refleja que mi entrada ha partido sin un norte definido, pero me quedaré en este tema que me parece ideal, más aún, cuando mi cuaderno de poesías, acaba de cumplir un año hace unos días. Es un cuaderno simple, que hace mucho quería comenzar y nunca lo hacía, hasta que un día me decidí y lo hice. Lo simpático, es que estuvo mucho tiempo en blanco luego que decidiera que sería destinado para ello, y un día aburrido del vacío, forcé unas líneas en clases de química; es así como se puede leer en la primera página, los siguientes versos:

Risas, ruidos, llamadas
¡Dejad esas bocas calladas!
Gritando, murmurando y hablando
En clase, el tiempo estamos matando.
  
  Refleja fielmente mis clases de química, pero luego, la mirada la puse en una pareja de compañeros, que se gustaban -según muchos- aunque jamás lo asumieron. Comienza a describir lo que hacían y con una rima muy rebuscada, el mismo continúa con:
Discuten, se retan y callan.
Se ríen y vuelven a hablar,
Se miran silentes y esperan
Lo que el tiempo les regalará.

     En verdad mi amigo gustaba de ella, pero no tenía el valor –quizá- de declararse, por lo que digo que:
El valor hace falta en algunos,
Pero sólo por formalidad.
Están juntas sus manos y risas:
Sus miradas reflejan verdad.
   
      Estos chicos, echaban corazones por los ojos, y todos sabíamos que se gustaban, pero jamás se atrevieron a formalizar como pololeo. Yo –soberbiamente- me atreví a presagiar lo que todos sabíamos: que un día pololearían, y es con lo que termino los dos últimos versos:
Se miran silentes y esperan:
El amor sus frutos dará.

     Estas líneas además, reflejan la paciencia, el amor y la valentía. Ellos ahora, son pololos, y se llaman Alonso y Daniela, a quienes les agradezco haber servido de motivación para el primer poema de mi cuaderno.


     Este cuaderno, lo transcribí una vez, bajo el título de: “Un Grito Desesperado” que fue mi pequeño, insignificante y a la vez con mucho significado, regalo para mi amiga Valeria, antes de irse de viaje. Fue una cosa sin ningún valor para alguien, pero que para mí, significa mis descargos y desahogos. Fue curioso, pues busqué por meses algo que regalarle, que sea parte de mi identidad, que sea algo que me recuerde, que sea una parte de mí que lleve consigo, y no fue sino una semana antes que se fuera, y cuatro días antes de que la vea por última vez, cuando se me ocurrió. Comencé al otro día a transcribir las hojas y hojas de versos, y estuve en los recreos haciéndolo. Una tarde imprimiéndolo totalmente artesanal, y luego, horas antes de entregárselo, lo anillé. Es lo más parecido a un libro que he hecho, pensando en eso de que un hombre debe plantar un árbol, escribir un libro y tener un hijo, y de ser así, sólo me faltaría el hijo, pues tengo dos paltos ya que crecen muy bien.
  
     Ahora, creo que la temática de este blog la cambiaré radicalmente, quizá sólo por un tiempo, y me dedicaré a transcribir mis poemas con la explicación pertinente, sin importancia alguna, pues casi nadie lee mis entradas. Así, con este primer poema, dejo esta entrada. Decodificaré el resto y un día publicaré mi libro de poemas, con todos los que aquí tampoco están.

viernes, 3 de octubre de 2014

Santos chilenos

Y se nos fue septiembre, sacamos la bandera, guardamos los pañuelos y nos frotamos las manos esperando el año nuevo, mientras contamos en reversa los días para salir de clases. Yo, en tanto, cuento las horas para emprender mi peregrinación a los Santuarios chilenos, de santa Teresita de Los Andes, san Alberto Hurtado y la Catedral Metropolitana.
     Hace mucho no escribía; desde el lunes pasado. He pensado en comenzar a subir una entrada semanal, pero éso, lo iré viendo con el tiempo. Lo que ahora más me motiva a escribir, es la peregrinación.
     Tres veces en mi vida he ido a estos lugares, especiales e importantes en mi religión. Dos con mis abuelos, y una colado con el Colegio de Humanidades, el año pasado. Esta vez, también iré con mis abuelos, con quienes siempre salgo.
     Lo que ofrecen los santuarios, más que la infraestructura, es un lugar de encuentro espiritual, de confirmación, compromiso y cambio. El entrar al santuario del padre Hurtado, es entrar a un oasis en pleno Santiago, donde el gris, ruido y ajetreo, quedan fuera e ingresas a senderos de verdes jardines con un silencio tremendo y un sentir único. En Los Andes, el encuentro es masivo, al menos para mí. Siempre ha estado lleno de gente, donde buses y buses se estacionan uno al lado de otro, y la gente que los aborda, sale a recorrer.
     La última vez que fui, fue con motivo de la Caminata Joven, en Auco, donde miles de jóvenes cruzamos un cerro a pie, entre cantos, rezos, alegría y juventud, hasta terminar en el Santuario mismo, con una hermosa Misa presidida por el entonces sólo Arzobispo de Santiago, el hoy Cardenal Ricardo Ezzati.
     Una vez más me dirijo al norte (centro para otros) en busca de una experiencia indescriptible como lo son todas y poder disfrutarlo al máximo. Como mención especial, agradezco a mis abuelos por invitarme y llevarme, y como siempre, a Dios por las experiencias que siempre me concede.
     Me voy de viaje, físico y espiritual. Me voy con esperanzas de algo por encontrar. Me voy con deseos e ideales. Me voy... quién sabe si volveré.

lunes, 22 de septiembre de 2014

Calidad, Motivación. Quiero un Chile mejor

La calidad en la educación es un tema en constante discusión. Para abordar este tema, lo haré como lo que soy: un estudiante. Lo hago con una visión crítica, en la sala de clases.
     Llevamos media hora de clase, me senté al final de la sala con el computador encendido.  El profesor puso una actividad en la pizarra, e insiste que de aquí al miércoles, la tarea debe estar lista. Si realizo una descripción general de la sala, es que todos están desordenados, en grupos. Ahora bien, para no generalizar, la realizaré de manera particular, detallando a cada uno con lo que realiza. 
     Primera fila, primeros cuatro bancos de adelante, sentadas en parejas, trabajan las cuatro mientras conversan, comentan la tarea y ríen. Tras de ellas, dos chicos conversando con el de atrás, sin cuaderno en la mesa, con actitud algo desganada y desinteresada. Al final de esa fila, un hombre y una mujer, muy interesados en lo que hacen, que es ver algo de un teléfono, pinturas de uña y cosas así.
     Fila de en medio, primeros puestos, tres personas juntas, mujeres, trabajando y realizando la actividad enérgicamente y consultando frecuentemente con el profesor, a quien tienen en frente. A sus espaldas, una pareja de pololos, donde ella le trata de explicar y él le hace caso. Luego vienen puestos desocupados hasta llegar al final, donde en una banca, un chico medita sin moverse en todo el rato. Tiene una mano sosteniendo su cabeza, audífonos, la corbata sobre sus piernas y la camisa fuera del pantalón. Piensa quizá qué cosa y tiene la mirada perdida en el piso de la sala.
     Última fila, pegada a la ventana, de donde proviene el ruido. Primer puesto, una chica escuchando música y participando intermitentemente de la risotada masiva, que comienza radicalmente en el puesto de atrás, donde una mujer ríe con alevosía y su compañero de banca, aporta con motivos para la risa. Luego, el centro de tensión, es quien provoca las risas con su propia risa, junto a una chica que estucha atentamente lo que él dice y toma algo de apuntes sin lograr mayor éxito. Luego, tras ella hay un chico recostado en la pared, sentado en su silla, con audífonos, escucha música. Se hace el interesado, como que trabaja, pero en verdad, no ha escrito nada y aporta comentarios a la conversación. Al lado y algo distanciado, uno que trata de trabajar con los audífonos puestos, concentrado en su cuaderno. Realiza una actividad, pero de otra asignatura, pues debe entregarla atrasado. Ahora, tras dos puestos vacíos, vienen las últimas cuatro chicas, de aquellas que uno no conoce, pues nunca hablan. Ella parecieran trabajar, pero al estar al lado de ellas, me doy cuenta que no. Sólo son calladas, pero están jugando con los cuadernos, escribiendo, dibujando garabatos y comentando cosas en voz baja.
     Hay algunos autoexcluidos de estas tres filas, que son dos chicas que se esconden tras un gran mueble en que se guardan los libros, quedando así ajenas a la vista de los demás, y yo, que me mantengo en el pasillo, al final de la sala, escribiendo esto, que nada tiene que ver con la actividad dada por el profesor.
     Aproximadamente, ocho personas trabajan, y el resto, no hace nada productivo. De esta manera, me viene la interrogante sobre ¿qué necesitamos para una educación de calidad?, podemos tener los mejores de profesores, pero necesitamos la motivación. Pero ¡venga!, no sólo la motivación por parte de los estudiantes, sino también la de los profesores. Este curso no es malo, pero siempre en esta clase específica, estamos igual, pero en unos minutos, se cambia la hora, llega otra profesora, y todos se callan, volvemos a nuestros lugares, sacamos el cuaderno y nos ponemos a trabajar; sólo porque la motivación es distinta.
     No podemos, todos los jóvenes, estar motivados por algo que nos obligan a hacer, por muy bueno que sea en un futuro o en el mismo presente, pero sí, podemos lograr una motivación en conjunto con profesores que nos motiven a aprender. Luego de eso, recién podríamos hablar de la calidad en la educación: la educación que recibimos, la educación que pedimos y la educación que demostramos.
     De todas las personas que realizan o realizaron la actividad, son sólo mujeres. Son ellas las con motivación propia de realizar el trabajo, de aprender y obtener logros. Quizá porque la asignatura tenga que ver con lo que quieran ejercer a futuro, quizá porque se les haga fácil aprender esto, o simplemente, porque quieren.

     Yo, en lo personal, me siento distanciado de esta materia, no me interesa, no me siento obligado a aprenderla y creo, que en unos años me arrepentiré de no aprovecharlo.
     Ahora bien, creo que para lograr la preciada calidad en la educación, requerimos una motivación por obtenerla. Aquellas personas que marchan por esto, han tornado la interpretación de las marchas en Chile. Ahora, una marcha ya no es vista como una instancia de manifestación pública en favor de una postura, requerimiento o queja; para mí, en el tema de la motivación sobre aprender, estoy convencido con que, aquella gente que se lo pasa en marchas pidiendo educación de calidad, no presentan la motivación por aprender (y si lo hacen son los menos), y aprovechan las manifestaciones como excusas para no llevar a cabo el proceso de aprendizaje. Mientras, los que sí tienen motivación, estudian y quieren lograr metas en su vida, para las cuales necesiten del estudio, se dedican a superarse, presentar las interrogantes y resolverlas.
     Por supuesto, no todas las marchas representan vagancia, ni nada por el estilo. Nuevamente, no quiero generalizar, sino mostrar la ironía presente en el reclamo por la "educación pública de calidad". Claro que hay marchas que se manifiestan en contra de otras injusticias y que no generan vandalismo y que deben llamar la atención de las autoridades por su manera de actuar y argumentos. 
     Espero que no se malinterpreten mis dichos, por lo que sintetizo: Calidad viene de la mano de las ganas de lograrla, aunque no es el único factor para ello, aunque sí el principal. No estoy en contra de las marchas, sólo de las innecesarias o estúpidas. Confío siempre en un Chile mejor, con miras al futuro, en donde no haya injusticias que reclamar, porque viviremos en un país justo, donde reinará la verdad.
     Espero un Chile siempre mejor.

miércoles, 17 de septiembre de 2014

Cuecas políticas malas, cuecas chilenas buenas

Que discurso más patético el de la alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá. No logro entender, cómo quieren unidad si no hacen más que dar discursos con la doble intención de generar odio en algunos, hablando de forma ácida, y a la vez, lograr el fervor popular. No pueden ellos, acaso, hablar del porvenir de Chile y dejar al fin atrás un pasado y dejar de lloriquear sobre hechos acontecidos hace tantos años. El rencor, es lo que tiene amarrado a Chile en lo que es. 
     Ahora, bien, es una inmensa falta de respeto para el País entero, que el primer pie de cueca de estas celebraciones, sea bailado por un joven de malas ganas, malvestido, con zapatillas, manos en los bolsillos y una disposición a nivel cero por lo que uno a simple vista puede apreciar. Una falta de respeto a la cueca, danza nacional y a cada uno de los chilenos. Quizá el ministro Lagos Weber bailó mal, pero le hizo empeño. 
     Creo por eso, que es no sólo es buen proyecto, sino que es una necesidad, aquel proyecto de Ley que promueven algunos DC, de hacer obligatorio un examen de cueca para poder egresar de cuarto año medio, porque el País que olvida sus tradiciones está perdido. El País que olvida su pasado, no tiene buen futuro; pero el País que quisiera vivir siempre del pasado, está en la decadencia y ruina total.
     Digo con ello, que una cosa son las tradiciones y raíces de nuestro pueblo, recordar nuestros errores para aprender de ellos y no volver a repetirlos. Pero lo que hace el pueblo de Chile, es olvidar las tradiciones, recordar los errores del pasado y tratar de revivirlos. Es así como algunos me pueden decir que no viví el gobierno del Presidente Allende, como para decir que fue el peor Presidente de la historia de Chile, así es que, no lo puedo catalogar así directamente; pero no os preocupéis, pues ya estamos viviendo de nuevo "la vía chilena a la decadencia". 
     Algunos quizá puedan decir que el gobierno de la UP no fue un error, y que el error fue el Gobierno Militar. Pues déjenme decirles, que no hace falta haber vivido ninguno de esos dos períodos para saber que el Gobierno Militar es mera consecuencia del gobierno anterior.
     Hoy no quería escribir de política, pero tuve que reescribir todo lo que tenía a la hora de ver lo acontecido en la inauguración de las Fondas en Santiago. 
     Quisiera haber escrito de que ya el ambiente dieciochero comenzó, que espero que no haya muertes ni accidentes a causa de conductores ebrios, que quisiera zapatear bien una cueca con alguna 'china encachá', pero debía desahogarme por lo que acabo de ver.
     Un pueblo que no se siente orgulloso de su ejército, no tiene buen camino. Así dijo hoy el Capitán a cargo de la alocución patriota en el acto cívico.
     Una compañera de curso, me decía, acerca de una entrada anterior, que yo sí era un revolucionario, y que mediante la escritura podía causar revolución. Yo dije no ser revolucionario como parte de La Revolución, que es la que plantea el comunismo. Sí, puedo ser un revolucionario, y crear una revolución que lleve a Chile al mejor camino, con la mirada en el horizonte, con una resolución de problemas por medio de diálogo, con un trato entre compatriotas, mayor que como vecinos. Un trato como hermanos. Un Chile en donde triunfe la verdad y la justicia y no la venganza y el rencor. Donde se den verdaderas oportunidades a la gente que se lo merece. Donde podamos salir adelante, remando todos hacia un mismo lado: hacia adelante.
     Adornado de copihues está todo hoy, con un cielo nublado desfilamos de mañana. Con tricolor en los adornos, con cuecas en los oídos y con Chile en el corazón. Así está todo hoy. 
     Quiero echar a andar por un sendero largo,
     verde arena y mar.
     Y lo voy a ir enrollando, en un ovillo,
     pa' guardármelo, en el corazón
     cuando no tenga la Cordillera blanca
     y me falte el beso rico de mi negra buenamoza.
     A ver si así no me pierdo caminando por ahí.
                                                           (Tito Fernández)
     Cito al gran maestro, Tito Fernández, cantor popular, para finalizar mi entrada, porque él es alguien que ama a su Chile y lo demuestra en éstos versos. Deseando con mi ser, que podamos seguir celebrando este Bicentenario, que aún no termina, porque aún no se cumple, sino hasta 2018; con la mejor de la alegría y poder disfrutar de buena manera, y termino nuevamente citando la misma canción de "El Temucano".
     Toma viejo amigo mi copla nueva,
     aquí estoy, con mi herida, cantándote mis versos.
     Mañana nadie sabe si seguiré con vida,
     mañana nadie sabe si cantaré de nuevo. (...)
     Todavía no termino; me falta un ¡Viva Chile!
     un ¡Viva Chile! grande, para empezar de nuevo.
     ¡VIVA CHILE!

domingo, 14 de septiembre de 2014

Se siente el olor a 18

Olor a asado en las calles, banderas pendiendo de los postes y en una que otra casa, en los capó de los autos, en los negocios. El cielo azulado, los cerezos en flor, las aves cantando. Ya estamos entrando en la semana del 18. Ya se nos han ido tres cuartas partes del año y comienza la recta final.
     El viernes, luego de clases me llegó un whatsapp, deseándome una felices vacaciones de Fiestas Patrias. ¡Dios mío!, si en mi colegio tenemos clases lunes y martes, y para más remate, tengo pruebas esta pequeña semana, mientras todos los demás disfrutarán en sus hogares, durmiendo hasta tarde y sacando provecho de una linda semana de descanso, sin si quiera agradecer a cuantos héroes nos brindaron estos dos días pintados en rojo en nuestros calendarios, y a los queridos honorables que fomentando el chilenismo, nos ceden la semana completa legalmente, si el 19 cae jueves o el 18 martes. 
     Este miércoles, por lo demás, se realizará el típico desfile de Fiestas Patrias, en donde todos los colegios gozan de su minuto de fama al pasar frente a las autoridades y flashes de cámaras y las aglomeraciones de gente, pues aquel día, el pueblo completo se paraliza en pos del acto cívico. Para mí, ha sido siempre un honor desfilar, pues me gusta. Desde quinto básico y hasta octavo, comencé a desfilar como miembro de la Banda Escolar de mi colegio básico, y al llegar a la enseñanza media, pasaría algo similar, pero no duré más de una semana en aquella banda. Ahí fue, en 2012, cuando volví a desfilar con el común de mis compañeros, y ahí fue, además, la última vez. Siempre he sido "apartado del rebaño". No sé si me guste, pero me he acostumbrado. Tanto así, que si no me apartan, me puedo apartar yo mismo. En segundo medio, es decir, el año pasado, fue la muestra más fehaciente de esto, ya que, como Presidente del Centro de Alumnos, desfilaba tras los directivos y delante del primer escuadrón de alumnos, sólo, como un dedo y sin saber muy bien qué pensar, porque hasta cinco minutos antes, estaba en medio del último escuadrón, hasta que me "apartaron".
     No es bueno apartarse del rebaño. Cuando hay que trabajar en equipo, me veo incapacitado a compartir tareas con los demás: las tareas de liderazgo, que acostumbro a llevar, pues soy mi propio líder, y creo que siempre debe haber uno, pero sucede que hay más personas con esta "cualidad" de líder, y cuando se encuentran a la hora de tomar decisiones, se producen roces. Por ello es que los supuestos "líderes" suelen verse solos, y cuando están acompañados, lo hacen de personas con un nivel de liderazgo menor, para poder influir sobre ellos.
     Ahora, creo yo, que cuando una persona tiene, o cree tener este supuesto "liderazgo", no necesariamente va a triunfar, pero sí va un paso adelantado en la senda del triunfo. El temperamento y la llegada a los demás, el poder de convencimiento es lo que sirve. Si tienes el poder persuasivo de convencer con buenos argumentos a los demás y una capacidad comunicativa, que se crea con la práctica del diálogo y trabajo en conjunto con los demás, es decir, el trabajo en equipo, tienes una vía al triunfo con doble vía, para que puedas adelantar a los otros: los de temperamento imponente. Aquel de mal genio que anda 'pateando la perra' y retando al mundo que no le sirve de ayuda. Busca elementos que puedan conformar un buen equipo para lograr su objetivo y los que no, los desecha; en cambio, el primer prototipo que expongo, el 'buena onda' utiliza todos los elementos que hay, y en vez de desecharlos, o les busca otra utilidad, o los capacita en lo posible.
     También hay un tercer tipo. El que aún está aprendiendo sobre cómo es el liderazgo, que no le gustan las ideas de los demás, pero que no sabe imponer la propia y no quiere decirse mejor que el resto de su equipo, entonces aplica la tolerancia hasta el punto que puede, pero siente en el interior una cierta voz de reconocimiento por lo hecho. Lo bueno, es que sabe acallarla, aunque igual a veces se inflama su ego y la humildad no alcanza para extinguir por completo tal incendio.
     Me considero en el tercer tipo y me doy cuenta de cuánto cambié el tema de mi entrada. Puedo dejar mi reflexión sobre el liderazgo como un largo paréntesis y continuar concluyendo el tema inicial.
     Es bueno aferrarse a las raíces y costumbres de nuestro Chile lindo y conservar la identidad chilena. Chile, nuestro queridísimo país, es demasiado rico en el sentido de costumbres, de tradiciones, y todo lo que entra dentro del gran concepto de cultura. Eso queremos rescatar con el proyecto "Mi País en la Mochila" con el que participamos del Torneo Interescolar Delibera. Para poder rescatar la cultura, la inclusión y respeto a las diversas culturas, tradiciones, etnias; pero por sobre todo al chilenismo propiamente tal.
     Queda pendiente para otra columna, entrelazar el tema del 18 con el romanticismo, y creo que ya sé cuál será el puente de juntura: el copihue. Qué hermosa flor y cuántos sentimientos me produce sólo verle. Por ahora, termino luego esta entrada. Esta entrada que no tiene mucha concordancia interna, que no cumple con lo que pensaba escribir ayer, que no refleja lo que quería escribir cuando la comencé y que cambió abruptamente a una "reflexión" debido a una discusión. Esta entrada que sólo demuestra que quiero decir tantas cosas a la vez, y debo limitarme a hacerlo en orden. Podría internarme en el fluir de la conciencia, pero bah... Por ahora termino luego esta entrada.

miércoles, 10 de septiembre de 2014

El Mundo Blogger

Ayer fue el día en que publiqué mi primera entrada, y me dediqué a aprender un poco del mundo del blog. Un poco, casi nada diría yo. Descargué en mi smartphone la aplicación Blogger, que aún no domino y al fin le dí sonido a las notificaciones de Gmail en mi teléfono.
     Llegaron correos todo el día por Blogspot, pero no por interacción en mi página, sino, porque había comentado yo antes otra entrada de otro blog, y se levantó una hecatombe de comentarios, que llegaban cada cinco minutos.
     Hace unos años, vi antes de dormir una película chilena, llamada "Malta con Huevo", y sólo recordaba que era muy cuática, pero no la había vuelto a ver. Hoy la puse y la recomiendo. Claramente, como toda película chilena, contiene escenas subidas de tono, pero el argumento es genial.
     Al entrar a internet, todos los comentarios son con respecto al tema de las bombas. Yo comentaba en la mañana, a la columna de don Hermógenes, que  en algunas ocasiones como ésta (el bombazo en el metro), agradezco la centralización de Chile, por mantenernos a los marginados del sur, apartados del terrorismo infundido en las grandes ciudades. Terrorismo por parte de simpatizantes del gobierno, por cercanos a ellos, por miembros de él, etc.
     El par de comentarios que se salvan del tema de las bombas, son las payas con motivo del dieciocho que se aproxima. Qué bonito es Chile y que lindo es ver el día dieciocho de setiembre, las casas con sus banderas flameando en el azulado cielo. Los cerezos en flor por la primavera y las loicas coloreando el paisaje con su pecho. Que lindo es sentir ese "olor a septiembre", como le llamo.
     Conversé con una amiga que está en el extranjero, y le preguntaba sobre qué haría ella para celebrar el dieciocho, pues el feriado sólo es acá. Que difícil sería para mí, pasar esa fecha fuera de mi Patria. Qué difícil no ver las banderas en las calles, el olor a asado en el barrio y los volantines corriendo entre las nubes. Comerse el diecinueve un buen mote con huesillo y sentarse a ver la Parada Militar, con "la guata como sandía".
     Creo que yo no podría. Sólo una vez he salido del País. Fui a Brasil y pasé por Argentina. La emoción es grande al entonar junto a compatriotas, el himno nacional al pisar tierra extranjera. La emoción es grande al volver a tu país y volver a posar tu pie en la tierra en que naciste; es grande la emoción, y sólo estuve fuera dos semanas.
     He tocado temas muy variados en esta entrada, pues ha sido como un resumen de mi día (dejo fuera el partido de la Selección, pues estuvo tan fome que casi ni atención le tomé).
     Finalizando mi día, escucho sobre los caminos de la vida, "discerniendo caminos, caminos anchos y angostos, y cuáles son los buenos criterios para escoger un buen camino: seguir siempre el bien, el camino del bien. El criterio para discernir qué camino es bueno y qué camino es malo en mi vida, es qué me hace bien y qué me hace mal, qué cosa me da paz,me deja tranquilo y contento; y qué cosa me genera soledad, amargura o intranquilidad. Las cosas de Dios dan la paz y las que no son de Dios lo contrario. A medida que uno elige el bien, se acostumbra a hacerlo, pero si uno elige el mal, se envicia con el mal."
     Son las palabras del padre Rodrigo Polanco en Misión 13, con las que me voy a dormir. Un gran mensaje para la vida y una gran pregunta para hacernos: ¿Qué camino elijo?

lunes, 8 de septiembre de 2014

Mi Propio Blog

Hace ya aproximadamente dos años, comencé a leer el blog de don Hermógenes Pérez de Arce, el que me interesó bastante y comencé a aprender más de la historia de nuestro País, desde el punto de vista que no enseñan en los colegios, desde el punto de vista que no toman en las noticias, desde el punto de vista que tiene demasiados respaldos que lo avalan, pero aún así, tiene muchos detractores y personas que se encargan de que así sea; desde el punto de vista de la verdad que no debe hacerse conocida.
Me gustó aquello. Que un joven como yo, pueda conocer la verdad. Lo que no me gustó, es que deba hacerlo por mis propios medios, pero eso es algo que apremia las ganas de querer saberla. De todos modos, me hace salir del montón que prefiere quedarse con la historia de los "cerebros lavados".
Creo que, puedo sonar algo soberbio, pero no ha sido esa mi intención.
Yo tan sólo quería satisfacer mis ganas de expresar abiertamente mis opiniones, aunque nadie las lea, pero que me sirva éste espacio de manera de descargo, de hechos, logros, derrotas, y demás cosas que me sucedan.
Al momento de abrir el blog, me dí cuenta que ya tenía una entrada antes, del año 2012, en la que me cuestionaba sobre la "moda" en el fútbol nacional. Ahora, ni ganas me quedan de hablar de ello. El momento de Católica es muy bajo, en que juegan sin ideal, formación, fuerza y hasta pareciera que sin ganas. Éso es algo grave, no sólo en el ámbito deportivo y competitivo que es lo principal, sino también en lo anímico, de la hinchada (sean los que van semana a semana al estadio, hinchas aperrados que solventan al club pagando las  caras entradas; o hinchas de regiones, como yo, que cuando tienen posibilidad de poder alentar desde el estadio, lo hacen en este país centralizado, pero la mayor parte del tiempo, debemos conformarnos con CDF y lamentándonos desde nuestros hogares, y que también generamos ingresos al club comprando los productos oficiales) que espera, luego de una agotadora semana, poder recibir una alegría el domingo, pero en cambio, reciben un resultado adverso, que no deja ganas de seguir viendo el partido. Pero ahí está la diferencia del hincha de Católica: que independiente del resultado, alentará de igual manera y apoyará, por más rabia que tenga, por más coraje y más tristeza, siempre alentará, porque la pasión de un verdadero cruzado, va por dentro y nace del corazón.
Finalmente, para concluir esta entrada, de la que espero sea la primera, y de las que tomarán temas muy variados -espero- como ésta, quiero decir que me siento feliz de realizar esto y espero pueda sacar buenos frutos. No espero fama, ni lectores ni adherentes, sólo poder dejar plasmadas mis opiniones aquí, y a ver si en unos años puedo volver a verlos y ver si he cambiado mi parecer según las cosas, vivencias y situaciones.